Hola, sexis, ¿cómo van? ¡Espero que superbien! No hace mucho que en Francia terminó el confinamiento y toque de queda y demás detalles para cuidarnos del COVID-19. Seguimos con precauciones pero afortunadamente todo avanza para bien.
Lo que sí nos queda es el « recuento de los daños »… Así le llamo a lo que nos revela la báscula después de meses de no hacer ejercicio y tirarnos en el sillón pata deprimir y echar el drink y los snacks.
Estoy segura que aún algun@s de ustedes, cada que se suben a la báscula recuerdan con remordimiento esos coctelitos o esos platillazos que se aventaron durante esos confinamientos inolvidables… Aïe aïe aïe.
En mi caso, chic@s, debo confesar que hace un mes y medio que pasé un periodo de depresión COVID. Después d’le trabajo llegaba a casa a mi sesión de snaks o cena improvisada con vino… Aïe… bien rico, peroooo… Cuando reaccioné (una semana después), corrí a treparme a la báscula y… Oh my Dior!!! Había subido 1 kilo. #ploc #ploc #ploc
“¡A ponerse en forma!”, me dije. Y claro, de la preocupación pasé a la acción. Retomé mi rutina de ejercicios diaria, una hora diaria sin pretextos y… Claro, un plan de desintoxicación alimenticia. Sí, un plan de reducción saludable aprobado por mi médico favorito, el doctor Ricardo Pineda Rementeria, fundador y director del Centro de Nutrición Humana y Recuperación Biológica en la ciudad de México.
A continuación, les paso mi régimen, chicos. Sin embargo, como siempre, les recuerdo que antes de iniciar ésta o cualquier dieta, deben consultar a un médico o nutriólogo. Personalmente, yo les recomiendo al doctor Ricardo, pero pueden ir con su médico de cabecera.
OK, después del recordatorio, les paso mi plan de reducción:
Desayuno:
Diariamente deben tomar dos frutas, ya sea en jugo o en gajos (están prohibidas las uvas, mango, plátano, dátiles, mamey y chico zapote).
1 rebanada de pan integral tostado o blanco.
1 taza de café o té endulzado con Stevia o Canderel.
2 cucharadas de linaza (pueden mezclarla con la fruta).
1 gelatina de dieta.
Y alguna de las siguientes opciones (una sola opción, chic@s):
Ó 2 huevos al gusto (revueltos, a la mexicana, tibios o en salsa).
Ó 60 grs de queso fresco: panela o cottage
Ó 100 grs de atún en agua.
Comida:
1 plato generoso de sopa de verduras, o un consomé desgrasado, o un plato de crema de calabacitas o de espinacas.
200 grs de carne (res, pollo, pescado, atún, barbacoa) guisado al gusto
½ bolillo o una tortilla.
1 taza de café o té endulzado con Canderel o Stevia.
Verduras cocidas o crudas.
Cena:
1 porción de queso panela o cottage con ensalada al gusto.
2 frutas (excepto las que les mencioné que están prohibidas).
1 taza de café o té endulzado con Stevia o Canderel.
2 cucharadas de linaza.
Líquidos permitidos durante el día:
Agua natural, aguas naturales de limón, Jamaica, tamarindo, etc. Todo endulzado con Stevia.
ESTRICTAMENTE PROHIBIDO COMER:
Arroz, mole, frijoles, lentejas, habas, pozole, papas, alcohol (solo una copa de vino de mesa se permite al día), galletas, postres, pastelitos y gelatinas que nos sean de dieta. “Todos estos alimentos rompen con el metabolismo de la dieta”, fue lo que me señaló mi médico.
Nota importante de mi médico: “Si en el transcurso de día sientes hambre, puedes comer verduras, gelatina de dieta o pequeñas cantidades de fruta (1 vasito de melón, o 5 fresas, o 1 durazno grande, 2 ciruelas, 3 higos o 1 naranja).
Les juro chicos, que yo perdí casi 2 kilogramos en 5 días. Sin embargo, insisto, antes de que inicien un régimen de reducción, deben acudir a un médico para que les indique si están aptos de iniciar una dieta y cuál es el tipo de dieta que deben llevar a cabo. Y claro, si les da luz verde para realizar el régimen de mi médico adorado, pues qué mejor.
Me cuentan cómo les fue, recuerden que ya es hora de iniciar la operación cuerpazo de verano. Más adelante les daré más tips. ¡Besos y cerezas! Muack!
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